A veces pasa, entras en una especie de estado hipnótico en
el que te mueves por rutina, no puedes pensar, no puedes avanzar en las tareas
más básicas que requieran un poco de concentración y ni mucho menos puedes
crear.
Dicen que es algo que les ocurre a los artistas, hablando de
falta de inspiración, de bloqueo y si no sabes cómo enfocarlo, seguro que terminas
hablando de fracaso.
No es sólo un problema en la vida de los genios, no es algo
que les ocurra en exclusiva a las personas que trabajan con una base de
inspiración, es un mal que acecha a todo el mundo en momentos determinados, solo
que algunos pueden seguir llevando los días y disimular que no están en ellos y
otros en cambio debemos colgar un cartel de “cerrado por vacaciones” para no alertar
a las personas que nos rodean y que
dependen de nosotros.
Algo parecido he sufrido estos días, quizás aún me encuentre
recuperándome, es algo lento, pero indoloro, aunque frustrante, porque por unas
horas, días o quizás semanas dejas de ser tú.
¿Cansancio? ¿Conflictos internos? ¿Ansiedad?... un representante de cada estado físico
y emocional que interactúan y se convierten en días de inestabilidad.
El bloqueo mental genera un estado en el que hay una gran dificultad
para retener información nueva y trabajar con la que ya tenemos, esto es un
problema para enfrentarse a las responsabilidades, pero también para las relaciones
sociales y para enfrentarse al día a día con normalidad. Dejamos de prestar
atención y esto hace que, sin poder controlarlo, dejemos de estar en activo.
Es un conflicto que debemos solucionar, por lo que requiere
que nos paremos a pensar en él. Razonar, desglosar las situaciones, ver esos
pequeños detalles que nos permitan hacernos una imagen del Todo que está
influyendo negativamente en nuestro estado natural. Debemos darnos un respiro,
respetarnos y comprendernos… ¡tenemos derecho a una desconexión!
Los expertos dicen que cualquier tiempo gastado en despejar
la mente será tiempo invertido, por lo que parar el ritmo y dedicarnos a otras
actividades, hasta que nuestra mente se reordene y despierte, es una tarea obligada
y un derecho adquirido.
A veces la apatía es la que nos deja en estado de shock,
debemos salir de ella y descubrir otros mundos fuera de nuestra zona de
confort.
Ni dos palabras más... deja todo como está y enciende la luz del trastero de tu mente, seguro que encuentras un millón de planes que dejaste sin hacer para caer en el colchón de la rutina.
“La vida es una serie de cambios naturales y espontáneos,
no los revistas, pues sólo crea pesar.
Deja que la realidad sea la realidad.
Deja que las cosas fluyan naturalmente como ellas quieran”
Lao Zi
No hay comentarios:
Publicar un comentario